Sin lugar a dudas, uno de los aspectos más destacados en las zonas turísticas hoy en día es el auge imparable de los pisos turísticos. Este fenómeno ha sido impulsado en gran medida por el boom de plataformas como Airbnb, que ha llevado a muchas personas a ver una oportunidad de negocio en el alquiler de viviendas vacacionales, dada la creciente demanda de alojamiento por parte de los turistas.
Sin embargo, con el crecimiento de esta tendencia, también han surgido otros problemas, especialmente en lo que respecta a la convivencia con los vecinos y la comodidad de los huéspedes; esta es la principal razón por la cual el aislamiento se ha convertido en una de las reformas más populares y necesarias en las zonas turísticas.
Demasiados pisos turísticos, y poca comodidad.
En los últimos años, las grandes ciudades y destinos turísticos de todo el mundo han visto un incremento exponencial en el número de pisos turísticos, ya que como hemos mencionado, muchas personas han visto como una gran oportunidad de negocio el hecho de convertir su segunda vivienda en viviendas de alquiler vacacional.
Y es que, aunque es cierto que este modelo de negocio ha traído beneficios económicos tanto a los propietarios como a las economías locales, también ha generado tensiones en las comunidades, especialmente en términos de ruido y molestias para los residentes permanentes.
Uno de los problemas más comunes es el ruido. Los pisos turísticos, al estar ocupados por personas de paso que pueden no estar tan preocupadas por las normas de convivencia, suelen ser fuente de ruido que molesta a los vecinos. Aquí es donde entra en juego el aislamiento acústico, una solución cada vez más popular entre los propietarios de pisos turísticos que buscan mantener la paz en el edificio y evitar conflictos con la comunidad.
¿Cuál es la clave para la convivencia?
El aislamiento acústico se ha convertido en una de las reformas más solicitadas en las zonas turísticas, especialmente en edificios residenciales que albergan pisos turísticos. Según nos informa la constructora Barquero Martínez S.L.U, este tipo de aislamiento se aplica a través de la implementación de materiales y técnicas que reducen la transmisión del sonido a través de paredes, techos y suelos, creando una barrera efectiva contra el ruido.
Para los propietarios de pisos turísticos, invertir en aislamiento acústico tiene múltiples beneficios: en primer lugar, los ayuda a prevenir que el ruido generado por los huéspedes moleste a los vecinos, lo que a su vez reduce las quejas y los posibles problemas legales. Este aspecto es especialmente importante en zonas turísticas con alto flujo de pisos turísticos, donde las quejas por ruido son una denuncia constante.
Por si fuera poco, el aislamiento acústico no solo es un punto a favor para los vecinos, sino también para los propios turistas: un alojamiento tranquilo y sin ruidos molestos es un factor clave para una experiencia satisfactoria, ya que los huéspedes valoran el silencio y la privacidad a la hora de pasar unas vacaciones. De este modo, un piso bien aislado podrá recibir mejores valoraciones y recomendaciones, dando como resultado un mayor número de reservas y mayores ingresos para el propietario.
Empresas como Airbnb han comenzado a destacar la importancia del aislamiento acústico en sus guías para anfitriones, conscientes de que la calidad del alojamiento es fundamental para el éxito del alquiler vacacional. Muchos propietarios están respondiendo a esta demanda, invirtiendo en reformas que mejoran la experiencia de los huéspedes y la relación con los vecinos.
El aislamiento térmico también es importante.
Pero el aislamiento no se queda solo en el ámbito acústico; en las zonas turísticas, en las que el clima puede variar de forma drástica, el aislamiento térmico también ha ganado popularidad como una reforma esencial para los pisos turísticos.
Este tipo de aislamiento consiste en la instalación de materiales que reducen la transferencia de calor entre el interior y el exterior de una vivienda. Esto es especialmente importante en zonas con climas extremos, donde los veranos pueden ser muy calurosos y los inviernos son extremadamente fríos; para los turistas, que buscan comodidad y descanso durante sus vacaciones, un piso bien aislado térmicamente puede marcar la diferencia entre una estancia agradable y una experiencia incómoda.
De hecho, en verano, realizar un aislamiento térmico ayudará a mantener el interior del piso fresco, reduciendo la necesidad de aire acondicionado y, por tanto, el gasto de luz. En ciudades del sur de España, como Sevilla o Málaga, en las que temperaturas pueden superar los 40 grados en los meses de verano, esta medida es totalmente útil.
Por otro lado, en invierno, el aislamiento térmico también evita la pérdida de calor, manteniendo el espacio acogedor sin necesidad de utilizar la calefacción en exceso.
¿Cómo se realiza el aislamiento térmico?
El aislamiento térmico se puede realizar de diferentes maneras, dependiendo de las características del edificio y las necesidades concretas.
Los métodos más comunes incluyen:
- Aislamiento de fachadas.
Se realiza en la envolvente del edificio, que es la parte exterior que está en contacto con el entorno. Una de las técnicas más utilizadas es el Sistema de Aislamiento Térmico por el Exterior (SATE), que consiste en colocar una capa de material aislante sobre la fachada y cubrirla con un revestimiento. Este sistema es especialmente útil porque actúa eliminando los puentes térmicos, que son zonas en las que el calor se escapa más fácilmente.
- Aislamiento de cubiertas.
Las cubiertas o techos son una de las principales zonas por donde se pierde o se gana calor; el aislamiento se realiza colocando materiales aislantes, como lana mineral o poliestireno extruido, bajo la superficie de la cubierta. También se pueden emplear cubiertas vegetales, que además de aislar térmicamente, ofrecen beneficios ecológicos.
- Aislamiento de suelos.
Aunque es un procedimiento menos común, también es muy práctico, sobre todo en edificios en los que hay contacto con el terreno, o en plantas bajas. Se puede realizar mediante la instalación de paneles aislantes bajo el pavimento o utilizando sistemas de calefacción por suelo radiante que incluyen aislamiento térmico.
- Aislamiento de ventanas.
Como todos sabemos, las ventanas son puntos críticos en los que se pierde bastante calor; dicho aislamiento funciona a través de la implantación de ventanas de doble o triple acristalamiento, que contienen cámaras de aire o gas entre los cristales para reducir la transferencia térmica. También es posible añadir tratamientos como láminas aislantes o cortinas térmicas.
Para realizar un aislamiento térmico efectivo, es fundamental contar con profesionales especializados en la materia, como:
- Arquitectos e ingenieros especializados: Estos profesionales cualificados pueden realizar un estudio térmico del edificio y recomendar las soluciones más adecuadas.
- Empresas de construcción o reformas: Son empresas que suelen contar con personal capacitado para llevar a cabo las obras necesarias.
- Instaladores especializados en aislamiento térmico: Estos técnicos están formados específicamente para manejar los materiales aislantes y garantizar una instalación correcta.
Y, ¿Cómo se realiza el aislamiento acústico?
Por otro lado, el aislamiento acústico también se puede llevar a cabo utilizando diferentes técnicas y materiales (cada uno adecuado para diferentes tipos de ruido, como el aéreo o el estructural).
Los métodos más comunes son:
- Aislamiento de paredes.
Consiste en la colocación de materiales absorbentes como lana de roca, paneles de fibra de vidrio o espumas acústicas dentro de las paredes. Estos materiales ayudan a reducir la transmisión del ruido entre habitaciones o viviendas adyacentes.
- Aislamiento de techos.
Es particularmente útil en edificios de varias plantas. Se pueden instalar falsos techos con materiales aislantes o sistemas de techos flotantes que absorben las vibraciones y el ruido que proviene de pisos superiores.
- Aislamiento de suelos.
Para reducir el ruido de impacto, como los pasos o las caídas de objetos, se pueden instalar láminas de aislamiento acústico bajo el suelo o emplear suelos flotantes, que desacoplan el suelo del resto de la estructura, reduciendo la transmisión del ruido.
- Aislamiento de ventanas y puertas.
El ruido exterior suele filtrarse a través de ventanas y puertas: gracias a el uso de ventanas de doble o triple acristalamiento y de puertas macizas con juntas de sellado acústico podemos solucionarlo, ya que estas medidas son capaces de dejar estos ruidos en el exterior.
¿A quien podemos acudir para realizar estas reformas?
- Ingenieros acústicos: Son expertos en identificar las fuentes de ruido y en diseñar soluciones de aislamiento adecuadas.
- Empresas especializadas en aislamiento acústico: Estas empresas cuentan con equipos técnicos y materiales específicos para resolver problemas de ruido.
- Instaladores certificados: Técnicos formados en la instalación de soluciones acústicas, como paneles y sistemas de aislamiento, garantizan que el trabajo se realice correctamente y cumpla con las leyes.
Estos dos tipos de aislamientos son completamente imprescindibles en pisos turísticos, como puedes ver. Aun así, el auge de los pisos turísticos debe ser controlado, ya que cada vez están causando más molestias (y no sólo acústicas, sino también económicas) a los residentes de muchas ciudades.
Sea como sea, está bien conocer estas medidas para implementarlas, tanto como medio de solución para estos problemas, como para nuestros propios hogares. Al fin y al cabo, ¿a quien le gusta pasar calor, frío o escuchar tantos ruidos del exterior? ¡A nadie! Conocer estas medidas es bueno para todos ¡sin duda!